La Asociación Internacional de Lesbianas, Gays, Bisexuales, Trans e Intersex de Europa (ILGA Europa), de la que forma parte la Federación Estatal LGTBI+ (FELGTBI+), denuncia que 2022 ha sido el año más violento para las personas LGTBI+ de la última década y señala como causa el aumento progresivo de los discursos de odio contra el colectivo. Así lo revela su Informe Anual sobre la Situación de los Derechos Humanos de las Personas LGBTI+ en Europa y Asia Central que ha presentado esta semana en Bruselas.
Según la organización internacional, los ataques planificados y los suicidios “a raíz del creciente y generalizado discurso de odio de políticos, líderes religiosos, organizaciones de derecha y medios de comunicación” han marcado el día a día del colectivo durante el pasado año.
Esta 12ª edición del informe de ILGA-Europa ha abordado el fenómeno creciente del discurso anti-LGBTI+, ya que, tal y como informa la entidad, “el odio hacia las personas LGBTI+ ha sido fomentado y utilizado para obtener beneficios políticos”. “Como resultado, las agresiones físicas y los ataques contra personas LGBTI+ con voluntad de matar han aumentado a niveles sin precedentes, incluidos dos ataques terroristas cerca de bares LGBTI+ en Noruega y Eslovaquia, en los que murieron cuatro personas y 22 resultaron heridas”, explica la organización.
Situación de los discursos de odio en España
Por su parte, la presidenta de la Federación Estatal LGTBI+, Uge Sangil, denuncia que “en España, el ascenso de la ultraderecha a las instituciones públicas ha provocado que, en organismos como el Congreso de los Diputados, tengamos que escuchar discursos que creíamos ya relegados a tiempos pasados como que existe un alarmante aumento de casos de homosexualidad y la transexualidad, como si ser LGTBI+ fuera una enfermedad, una pandemia”.
“Tenemos ley, pero el odio va a seguir existiendo y mientras siga alimentado desde las instituciones públicas las personas LGTBI+ seguiremos sufriendo agresiones y ataques en las calles. Por eso, necesitamos con urgencia un Pacto de Estado contra los discursos de odio que la Federación Estatal LGTBI+ y otras entidades de la sociedad civil estamos promoviendo”, anuncia.
Asimismo, ha recordado que “durante la tramitación de la Ley Trans y LGTBI+, las personas trans hemos sufrido un brutal discurso de odio que nos ha presentado como violadoras y asesinas, entre otras barbaridades, lo que ha generado muchísimo sufrimiento llegando incluso a intentos autolíticos. Esto debe parar ya y le pedimos a los medios de comunicación que lo tengan en cuenta a la hora de dar espacio a estos discursos”.
El Colectivo Gamá: "no podemos bajar la guardia"
Desde el Colectivo Gamá, ya se pronunciaba hace una semana Montserrat González Montenegro, su presidenta, comentando que “estamos viviendo un momento histórico. Ahora se reconocen los derechos de todo el colectivo, con todas sus letras. Una nueva etapa donde los derechos LGTBI se garantizan, sin embargo, no podemos bajar la guardia porque el avance en derechos siempre lleva asociado la reacción de quienes no entienden la igualdad ni la respetan”.